viernes, 25 de julio de 2014

UN MARIDO DE IDA Y VUELTA




Si hay algún proyecto que este año nos haya dado más anécdotas y devenires, sin duda ese es UN MARIDO DE IDA Y VUELTA. Una obra que nos divirtió desde el mismo instante en que hicimos la primera lectura de guión.

Hacía ya tiempo que teníamos en mente montar una obra de Enrique Jardiel-Poncela por varias razones, porque de sobra es conocida su comicidad, su capacidad de enredo y sus guiones nos parecían muy interesantes. Decía hace poco tiempo en una entrevista el actor Pepe Viyuela, que a todo actor/actriz le llega su Jardiel-Poncela, y a nuestro taller le ha tocado este año. El primer proyecto que tenía todas las papeletas de que lo lleváramos a cabo este año era "Los habitantes de la casa deshabitada", una obra muy divertida, pero en la que la distancia entre protagonistas y reparto era bastante más amplia que "El Marido". Por tanto, finalmente nos decantamos por la revisión del texto "Lo que le pasó a Pepe después de muerto" que fue como se llamó en un principio UN MARIDO DE IDA Y VUELTA, sobretodo por su puesta en escena tan coral.

Los actores y actrices del proyecto no han conocido, durante el montaje, la versión fílmica de la obra, protagonizada por tres grandes: Emma Penella, Fernando Fernán-Gómez y Fernando Rey. Y no lo han hecho, para que pudieran encontrar su propia visión de los personajes, sin contaminación alguna de previas visiones del texto. Y la verdad es que el resultado final quedó bastante bien.

Todo lo que aquí contamos puede sonar muy bonito, pero el camino no lo ha sido tanto. Lo primero es coordinar a los catorce actores y actrices, para que no faltaran a los ensayos. Y después está el que trabajen con ahínco e ilusión en el texto, ya que la gran mayoría de l@s participantes era noveles o poco experimentados en estos menesteres. Pero el problema grande llegó cuando unas semanas antes, ya metidos en pleno Ciclo de teatro, nuestro compañero y protagonista en el trió amoroso de la historia, Guillermo Ortega, se encontró indispuesto y con unos problemas de salud que ponían en peligro la representación de la obra. Eso nos obligó a tomar decisiones difíciles, pero necesarias, y se buscó a un sustituto, el cual no sabía con exactitud si finalmente representaría la obra, pero a pesar de ello, accedió a aprenderse el texto y conocer los parámetros marcados en la obra para el personaje, incluso a pesar de estar metidos de lleno en plena evaluación final del Instituto. Una movida importante, como se diría en la jerga juvenil.

Es por ello, que con el permiso de todo el elenco, que estuvo maravilloso y estupendo en su representación, queríamos brindar nuestro más sincero agradecimiento a Javier Navaro, su dedicación y esfuerzo para ayudarnos a que el público del II Ciclo de Teatro no se perdiera la oportunidad de disfrutar de nuestra visión del desternillante texto de Jardiel-Poncela. Muchas gracias Javi.

Y ahora, permitirnos que hablemos de otra cosa importante que ha caracterizado a este grupo. Hay que destacar, que a pesar de todos los escollos que hayan podido aparecer en el proceso de montaje de la obra, finalmente la han sacado a flote y con destacada calidad en las interpretaciones. El público salió muy contento del teatro y reconociendo que habían disfrutado con el espectáculo. Y esto se debe a los mensajes de aliento y ánimo constante que se profesaban todos los compañeros del proyecto en ensayos y a través de nuestro grupo de "whatsapp". También, a que no se han dejado vencer ante las adversidades, que han sabido estar unidos cuando era necesario y han luchado codo con codo por y para que la representación fuera un éxito. Por tanto, enhorabuena al equipo por su trabajo, y tenerlo en cuenta para futuras producciones. Habéis sido un ejemplo a seguir.

Por último, es preciso dedicar unas líneas a Guillermo Ortega, no sólo porque ha sido un compañero ejemplar, porque se ha implicado de lleno en prácticamente todas las propuestas, porque siempre ha estado para echar una mano o porque también ha tenido que luchar contra adversidades en el escenario. No sólo por eso, estas líneas se las dedicamos porque le vamos a echar mucho de menos, aunque estamos seguros de que en tierras sevillanas seguirá buscando, puliendo y perfilando ese pedazo de artista que lleva dentro. ¡Guille, te queremos y en este taller siempre tendrás un montón de amigos y una casa donde conde encontrar cobijo!

Las fotografías son cortesía de nuestro compañero Pedro Muñoz.



























lunes, 21 de julio de 2014

CIANURO, ¿SÓLO O CON LECHE?



A menudo, tratamos de visualizar e imaginar esos proyectos en los que nos involucramos, pero hay ocasiones en que la realidad final nos sorprende y echa al traste todas esas visualizaciones. Es el caso de la puesta en escena de "Cianuro, ¿sólo o con leche?". Al principio quisimos darle un aire misterioso, como si se tratara de una especie de thriller, pero pronto comprendimos que esta historia era más corriente de lo que nos pensábamos y que en nuestro entorno rural, si nos parábamos a observar, podíamos encontrar sin mucha dificultad todos los perfiles de nuestros personajes, e incluso algunos con las intenciones y pensamientos de los que nos tocaba interpretar.


Así pues, "Cianuro", como coloquialmente comenzamos a llamarle al proyecto, es la obra más serrana que hemos hecho, y eso, a pesar de que el autor, Juan José Alonso Millán, la ubicaba por Extremadura. Pues con las intenciones de hacerlo más nuestro, montamos este proyecto teatral, a veces desconfiados y a veces intrigados en si el público reaccionaría bien a la historia macabra, pero cargada de humor que narrábamos. Y a pesar de tantas incertidumbres, buena parte de los integrantes del proyecto trabajaron con tanto ahínco y tanto esfuerzo que a un mes antes de su representación, gran parte del elenco tenía todas las indicaciones más que asimiladas. Hay que destacar, por tanto, que el equipo de este proyecto son unos y unas currantes destacados, y no por ello, exentos de miedos y dudas. Por ello, he querido dejar patente en este, nuestro blog, la disciplina con la que se enfrentaron al proyecto, debido a que creo que no han recibido todo el reconocimiento que merecían. ¡Enhorabuena, chic@s!

En cuanto a la historia, creo que no es menester centrarme en contarla, ya que, después de cincuenta años, es ya una historia más que conocida. Pero sí quisiéramos dejar patente, que en ningún momento nos hemos querido burlar o hacer una caricatura de todas esas personas que se entregan a los familiares con algún tipo de dependencia, sino al contrario, es una alabanza a tan admirable gesto. Sin embargo, sí nos burlamos de la moral auto-impuesta, a veces vana y vacía de sentimientos, que hace que algunas personas se trastornen psicológicamente ante una situación parecida. Y, creemos, que esta visión que nosotros ofrecíamos de la obra, no dista mucho de las ideas que propone el autor o aquellas representaciones que se llevaron a cabo del mismo texto en el programa Estudio 1 de TVE.

Por todo esto, creemos que nuestro "Cianuro" es más bebedor del humor negro. Un humor negro, que ha generado distintos tipos de opiniones en el público que se acercó a vernos al Teatro de La Merced. Y sólo por eso, por esa división de opiniones, yo creo que hemos triunfado. También, sabemos que, los nervios de vez en cuando nos la juegan, y al final de la obra, casi perdemos en la historia al respetable, por algún que otro despiste o lapsus, fruto, ya digo, de los nervios.

Sería oportuno decir, también, que han habido unas interpretaciones magistrales dentro del equipo de este proyecto, no sería buena idea numerarlas, porque quizás caeríamos en el error de aumentar el ego de los actores y actrices, pero, me reitero, han habido trabajos que han rozado la profesionalidad. Aunque, entre tanta alabanza, también debemos de reconocer, que hay algunas cosas mejorables, que somos conscientes de ello y que, como se suele decir: con tiempo y una caña... mejoraremos, seguro.

Por último, hemos de agradecer a Paco García y Pepa Yuste su colaboración, ya que, muy amablemente, nos cedieron parte del mobiliario "inerte" que vestía la escena. Una escenografía tan oscura, como las intenciones de algunos personajes de la obra. Con esa escenografía, queríamos, primero resaltar el aire serrano de la obra, y segundo hacer una alegoría a lo inertes que en apariencia parecen muchas personas que se resignan a los valores morales atrasados, desprovistos de intelecto y retrógrados que ensucian la sociedades rurales, donde, por fortuna, no todo es boina y garrote.

Os dejamos unas fotografías del estreno, cortesía de nuestra compañera Cristina Rodríguez, así como un enlace a una reseña que hicieron en el Diario digital Ideal Sierra de Cazorla:

http://cazorla.ideal.es/noticias/cazorla/3047--cianuro-isolo-o-con-leche-segunda-propuesta-del-ii-ciclo-de-teatro-ies-castillo-de-la-yedra-.html